Paso 1: Limpieza
Lo primero que debe hacer cuando encienda un horno por primera vez es limpiarlo. Dado que el horno ha sido almacenado y manipulado durante el transporte, puede haber suciedad o polvo acumulado en el interior. Use un trapo húmedo con un detergente suave para limpiar los paneles interiores del horno. Después de la limpieza, asegúrese de secar bien las superficies para evitar la corrosión.
Paso 2: Configuración
Una vez que el horno ha sido limpiado, ajuste los controles según lo indique el manual del propietario. Esto incluye colocar el control de temperatura en el nivel correcto, elegir entre el modo de convección y el modo de cocción normal, y establecer la hora del reloj.
Paso 3: Calentamiento
Después de configurar los controles, es hora de encender el horno. Encienda el horno a la temperatura deseada durante al menos 15 minutos. Esto ayudará a eliminar los últimos restos de humedad y cualquier residuo de productos químicos dejados por la limpieza.
Paso 4: Prueba
Una vez que el horno se haya calentado, es hora de realizar una prueba. Coloque una placa de hornear en el horno y coloque un pastel de postre en ella. Ponga el temporizador para el tiempo de cocción recomendado y compruebe si se cocina uniformemente. Esto le dará una idea de cómo funcionará el horno con cualquier otro alimento.
Ahora que has aprendido cómo usar tu horno la primera vez, ¡estás listo para comenzar a cocinar! Siempre siga el manual del propietario para obtener información sobre el uso seguro y eficiente de su horno. Utilice los alimentos adecuados para el horno, mantenga el horno limpio y revise los filtros de aire para asegurarse de que su horno siga funcionando sin problemas.